Equilibrio del destino.

El hijo del diablo rozó tu piel,

ese mal nacido se fue fiel,

siguió sus instintos y

casi logró alejarte de todo lo querés ser.

Una noche te encontró

y no lo dudo,

su herramienta de tortura utilizó

mientras tu alma quebró.

Hoy no hay noticias sobre él,

espero que este muerto en vida
y cumpliendo su condena,
porque la verdad: no me da pena.

Yo me pregunto,
¿En dónde está la justicia?
¿En dónde estuvo en ese instante Dios?
¿En dónde está Dios...?

Aún no logro entender
como un hombre puede odiar tanto
como un hijodeputa pude vivir,
como un condenado pude que camine por ahí.

Pero sí logro entender,
porque ese mismo Dios
te colocó en mi camino,
y porque hoy estas aquí conmigo.

Tú me das fuerzas
para creer que todo es posible,
que para crecer y superarse
solo hay que quererlo hacer.

Tú me has demostrado
que la vida sigue,
que el reloj no se detiene
y que el amor todo lo puede.

Tú lograste despertar
mi admiración hacia ti,
Tú lograste que te quiera mucho más
de lo que lo que puede que alguna vez te dijera.