28 feb 2009

-privación de presencia-


Sin previo aviso
justo en medio de mi pecho
renació aquel sentimiento
que me oprime y consume.
Aquel que creía muerto
hoy me revive y tortura.
Inexplicable con palabras
solo entendible mediante suspiros,
comparable con la angustia
y parecido a la tristeza.
El estar lejos me provoca
no querer saber nada.
El transformarte en invisible
creí que me iba a servir,
que me iba a dejar vivir,
que así iba a dejar de sentir.
Partes de mi he perdido
y con pequeños trozos me rearmo.
Pero la ausencia sigue ocupando ese lugar
y ni siquiera tengo ganas de ocuparlo,
nada me convence, nada lo rellena .
Nada te iguala.



--El día que deje de llorarte, tal vez intente buscarte.---
--V&C--

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